domingo, 21 de octubre de 2012

A Buen Puerto




Al fin se ha llegado a un momento solo y frío, en el fondo de la repulsión se extrañaba a esas lejanas y taciturnas tardes grises cargadas de añoranza. El cálido abrazo de la soledad a cuestas por fin cede sus riendas a la creatividad. Se retorna al sendero de la creación fecundado e inspirado por la constante melancolía y destrucción.

Deambulaciones,

...cansado de ese rol patético, , obligadamente se abre el viejo cajón de mañanas pusilánimes para brindarles tonos grises, multiplicarlas y cosechar sonidos agonizantes de una guitarra que exponencialmente pierde su furor, es tiempo captar al tiempo repulsivo y cobarde en una obra, un rastro del suspiro por el cual la vida y muerte se funden en contratiempo, la realidad es palpable, se yuxtaponen como tránsitos en el abismo fenomenológico llamado vida.

…Jugar a la inmortalidad...

...regocijarme de la estúpida y cansada existencia humana...


Se abre el infierno
 y el torrente de su pestilente aliento
recorre
gloriosamente esta realidad de mierda. 





Es indescriptible 
la sensación estúpida
de felicidad.

martes, 28 de agosto de 2012

Actitud < Aptitud


"La actitud únicamente marca diferencia entre los círculos con aptitud."

jueves, 5 de julio de 2012

martes, 12 de junio de 2012



… el efímero momento; fue sólo ello.

Sentado y pensativo observa al velo nocturno devorar lo que hace unos minutos era una tarde gris. Recorre la mirada  por la pávida calle sólo para concluir que su mirada es el único rastro de vida que cruza los adoquines en este anochecer lluvioso, cierra por un instante indeterminado sus ojos taciturnos y los párpados craquelados establecen una ilusa barrera con el mundo natural, así la mente camina el borroso sendero del pensamiento.
El escenario era una costa con rocas ovaladas en millares, brisa pálida, mar al infinito y frío sutil… ¡Oh inmutable imagen!
[La lluvia cesa]
El marco de la ventana ha sido su asiento por algunas horas. Abre los ojos y contempla un mundo reflexivo de luz ámbar golpeando los charcos callados; espejo y rastro de un pasado torrencial y vertiginoso, eco solitario. Recordó entonces la juventud e importancia de un reflejo, pensó en ella como reflejo de sí.

Remembró charlas interminables entre soles, el cálido abrazo y la falsa seguridad que la muerte se encargase de extinguir. A menudo recordaba los placenteros momentos a su lado, sólo quedaban escusas dignas que el tiempo filtra para mantenerlos en su estado más delicado y pueril.
Se los vio desnudos en el lago, entregados a la eterna niñez jugando bajo un mundo grisáceo. Recordó… y recordó. Aquella etapa fue una ligadura imperecedera que durante sesenta y cuatro años se reprochó a diario por la decisión tomada en un punto de inflexión.

Su decisión: Habitar el paréntesis melancólico llamado .

[La lluvia regresa]

Por su mejilla escurre una lágrima cristalina y agónica, al caer su eco retuerce cada instante placentero y se tiñe en rojos naranjas y negros; dramatismo total. Enfurecido coge el único objeto animado de la habitación construida en madera de pino malgastada, corroída hasta las entrañas. Se trata de una vela enaltecida por su llamarada vertical apacible, es tomada con frenesí mientras  avanza unos pasos con la vela. Se adentra en la profundidad de la habitación para coger el único rastro de una realidad perfecta, así con una mano sujeta a la vela mientras que la otra sostiene firmemente a su atesorada reliquia, se dirige maldiciendo entre dientes a la silla mecedora (único mueble del lugar cuya principal distinción es su inmovilidad en el tiempo y espacio). Cansado Toma asiento; al culminar dicho acto arroja un suspiro pesado y caliente. En ningún momento dejó de sujetar a la pintura o a la vela. Contempla a la pintura con melancolía, recita casi en silencio palabras de esperanza y despedida. Pasa sus manos por cada superficie y pincelada la acaricia con un nivel de respeto formidable. Un silencio breve cubre la habitación, el cuadro y la vela caen súbitamente al piso… ocurre un efímero momento, solo ello.

domingo, 18 de marzo de 2012

Reseñas del Cuadro


Sonreír por lástima; es superfluo llorar.

sábado, 10 de marzo de 2012

Árboles y Pensamiento.


Ante este profano, ridículo y caricaturesco escritor se ha develado el secreto tras la vida humana:
Lanzar mierda y lavarse las manos.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Idiosincrasia del Amor


El amor es un perpetuo descubrimiento, una inmersión en las profundas aguas de la realidad y una recreación constante. El amor no es lucha ni conquista.

(Imagen con mérito ilustrativo)